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Parece que el leasing y el renting están de moda, pero la verdad es que son dos modalidades que llevan mucho tiempo en el mercado y cada vez se utilizan más. Se trata de dos opciones que van dirigidas, además de a grandes y medianas empresas, a autónomos y negocios pequeños que consideran estas opciones como las más interesantes para financiar su capital.
Pero… ¿sabemos la diferencia entre el leasing y el renting? Muchos os hacéis esta pregunta y desde hoy va a quedaros claro, ya que en quepasasi.es hemos preparado un post dónde te lo contamos todo sobre estas dos formas de financiamiento.
Diferencia entre leasing y renting
Las dos opciones consisten en el alquiler a largo plazo de algún bien, sea un vehículo o un equipo tecnológico. Las dos son muy fáciles de contabilizar y el tipo de mercado más habitual en este tipo de contratos es el automóvil, por lo que si buscas un poco de información, encontrarás explicaciones a partir de ejemplos con coches.
Son muy parecidas y cada vez más frecuentes, pero tienen algunas diferencias. Su principal diferencia, es que el renting no permite la posibilidad de adquirir el bien al final del contrato. Veamos con detalle qué son estas dos formas de financiación, en qué consisten, para qué sirven y cuáles son sus ventajas.
¿Qué es un leasing?
En primer lugar, debes saber que solo se puede usar el “leasing” para adquirir bienes relacionados con actividades económicas. Es decir, a nombre de empresas. Consiste en un contrato de arriendo de equipos mobiliarios e inmobiliarios, lo que entenderíamos como un alquiler con opción de compra al final del contrato, que acostumbra a ser entre 24 y 72 meses normalmente.
Una vez ha terminado este período, el titular decide si adquirir el bien en propiedad pagando el valor residual que hay estipulado en el contrato, cambiarlo haciendo un nuevo contrato o prorrogar el contrato con unas nuevas cuotas mensuales. Pero lo mejor es que si eres empresa o autónomo, vas a poder financiar el 100% de este bien, sin pagar entrada, con un tratamiento fiscal muy ventajoso del que hablaremos después.
¿Para qué sirve un leasing?
El leasing sirve para denominar a una operación de financiamiento de máquinas, viviendas u otros bienes por parte de una empresa especializada, que se lo arrienda a un cliente que tendrá la opción de comprar lo que haya arrendado en la fecha de término del contrato.
También sirve, de algún modo para proteger la empresa de la obsolescencia: el hecho de tener el bien arrendado, reduce el riesgo de obsolescencia para el arrendatario. Y a su vez, también es interesante porqué contribuye a tener menos costes de financiamiento: a veces, según el tipo de bien, el arrendamiento es más barato que otro tipo de financiamiento, ya que en los arrendamientos, las arrendadoras no cobran comisiones de administración, que en cambio los departamentos de crédito delos Bancos, sí cobran.
Ventajas y desventajas de un leasing
A continuación vamos a contarte cuáles son las ventajas y desventajas de un leasing para poder considerar todos sus aspectos más prácticos y compararlos con los del renting.
Ventajas de un leasing
1. Flexibilidad: para obtener una renovación tecnológica en los equipos o flotas de vehículos. El arrendamiento contiene disposiciones menos restrictivas que las de otras formas de financiamiento, ya que los arrendadores pueden hacer innovaciones y hacer contratos que se adapten a sus necesidades.
2. 100% de financiación: se puede financiar el 100% de la inversión en el activo. Habitualmente los contratos de arrendamiento se firman sin exigir al arrendatario una cantidad de dinero inmediata, lo que se convierte en una gran ayuda para que las compañías puedan maximizar el uso de su efectivo.
3. Ventajas fiscales: el valor de las cuotas de amortización se pueden tomar como gasto tributario, por lo que el valor del bien puede deducirse como gasto, a excepción del pago del valor residual del bien.
4. Es muy fácil de contabilizar: solamente debes considerar el tipo de plan general de contabilidad según el tipo de empresa que sea (microempresa, PYME o grande empresa) y contabilizar los datos del leasing en los asentamientos debidos. Para que lo veas de una forma más rápida y sencilla, compartimos contigo el siguiente enlace sobre cómo contabilizar un contrato de leasing.
5. Al terminar el contrato, puedes optar si compras el bien o no.
Desventajas de un leasing
– Solo se puede ser el propietario del bien una vez ha terminado el contrato del leasing.
– No acostumbran a incluir servicios adicionales: en el caso de los coches, por ejemplo, supone que los seguros , conservación y reparaciones tengan que asumirlos la empresa o autónomo, así que se convierte en un sobrecoste adicional. El renting, en cambio, incluye estos servicios adicionales.
– Si se cancela el contrato, se debe pagar una “penalización” por incumplimiento.
¿Qué es un renting?
El renting, en cambio, se trata de un alquiler “a largo plazo” que normalmente dura entre 1 y 5 años, pagando unas cuotas mensuales que incluyen la utilización del bien, impuestos derivados del equipo, servicio de mantenimiento, seguros, reparaciones, asistencias, etc. Además, tanto empresas como particulares pueden ser titulares de un contrato de renting.
Pero en el renting, a diferencia del leasing, no hay la opción de comprar el bien una vez se ha terminado el contrato, por lo que el titular no podrá ser nunca su propietario, ya que al final del plazo se debe devolver el bien arrendado o renovar el contrato con uno nuevo.
¿Para qué sirve el renting?
El renting, es una opción más orientada a personas y empresas que quieren disfrutar de poder tener equipos mobiliarios sin preocuparse de reparaciones, seguros, impuestos, etc.
A nivel empresarial, sirve para poder disponer del uso de un inmovilizado sin aumentar el endeudamiento de la empresa o incluso disminuir las posiciones de tesorería disponibles para la adquisición. Además, como es un contrato sin cargas financieras, no está sometido a los cambios de los tipos de interés, un punto muy importante para la adquisición de un importe elevado en inmovilizado…
De una perspectiva más concreta, el renting sirve para financiar casi de todo (menos inmuebles): vehículos profesionales e industriales, maquinaria, tecnología, mobiliario, informática, centralitas, equipos deportivos, luminaria, fuentes de agua, etc.
Ventajas y desventajas de un renting
A continuación vamos a contarte cuáles son las ventajas y desventajas de un leasing para poder considerar todos sus aspectos más prácticos y compararlos con los del leasing.
Ventajas de un renting
1. Se utiliza el bien sin endeudarse: no es necesario hacer ningún desembolso, salvo el pago de las cuotas periódicas y el depósito de una fianza en el momento de hacer la operación.
2. Facilita la gestión administrativa de la empresa: integra en una sola factura el alquiler y los servicios complementarios.
3. Transforma algunos costes variables a fijos: como son los mencionados del mantenimiento, reparaciones, seguros… Y también debemos tener en cuenta que en las cuotas de pago, se incluyen estos servicios.
4. Fácil contabilización: se considera como un gasto más del ejercicio para la empresa arrendataria. Para que puedas ver de una forma más práctica cómo contabilizar un contrato de renting, te facilitamos este enlace, dónde lo encontrarás explicado a través de un caso práctico muy fácil de entender.
Desventajas de un renting
1. Cláusulas de penalización: incorpora estas cláusulas por un uso excesivo del bien. Por ejemplo, en el tiempo de utilización del mismo que alteran el coste inicial previsto de la operación.
2. La rescisión anticipada: acostumbra a implicar el pago de una indemnización bastante elevada.
3. Depósito de una fianza.
Esperamos que este artículo te haya sido de gran ayuda para entender cuál es el significado de un leasing y cuál el de un renting. A partir de hoy, seguro que puedes valorar cuál de estas dos opciones se adapta más a tu situación y ahorrarte unos costes de endeudamiento que no tenías previstos. Si te ha gustado nuestro artículo de hoy, no dudes en visitar nuestra sección de negocios, dónde hablamos de más temas relacionados con el mundo empresarial.