En algún momento, estando en la cocina, nos han dicho que no se puede congela la carne por segunda vez, después de haber sido descongelada. También hemos llegado a oír que este proceso es uno de los más peligrosos, cuando hablamos de cocina y alimentos.
Pero… ¿Sabes por qué no es recomendable, exactamente?
Pues bien, según nos explican expertos en alimentación y cocina, Contacto Cocina, llevar a cabo este doble proceso, sin importar si la carne ha sido descongelada en su totalidad o de forma parcial, no es conveniente por un motivo muy sencillo: antes de la congelación, la carne que estamos manipulando, contenía unos microorganismos resistentes al frío. Si descongelamos esta carne, estamos favoreciendo la proliferación de estos microorganismos. Pero si además, la volvemos a meter al congelador, lo estamos haciendo con más cantidad de estas bacterias, y por lo tanto la estamos haciendo menos seguras para el consumo.
En resumen, lo que nos parecía algo nimio y sin importancia, resulta que se ha convertido en un asunto serio. Sobretodo cuando hablamos de bacterias en nuestra comida.
Pero, a parte de el aspecto fundamental que es nuestra propia seguridad, existen más motivos por los que no debemos llevar a cabo esta práctica. Al volver a congelar por segunda vez, nuestros alimentos sufren modificaciones perceptibles al gusto, olor y textura. Esto quiere decir que, un producto de primera podemos convertirlo en un producto de tercera.
Todos los alimentos están compuestos por agua. Para hacernos una idea, según el Departamento de Agricultura de EE.UU, el 66% de un pollo es agua y en el caso de la carne de res, estamos hablando del 71%. Con lo cual, cuando la temperatura de la carne desciende entre -2 º y -18 º, el agua que contienen crea microcristales, que se convierten en una especie de espadas afiladas, que rompen los tejidos conjuntivos de la carne (o cualquier otro alimento). Al descongelarse, las estructuras agujereadas dejan de ser capaces de retener esa agua que contenían, perdiendo jugos y cualidades. Si esto es lo que pasa la primera vez que congelas un filete de carne, imagínate si lo congelas una segunda…
Y… ¿Qué consecuencias puede traernos congelar la carne más de una vez?
Principalmente una de las consecuencias más importantes es que podemos intoxicarnos. Vómitos, diarreas, deshidratación…
Con todo esto merece la pena tener en cuenta ciertos aspectos para saber conservar la carne de la forma más optima y evitar todo esto. ¡Toma nota!
- La mejor forma de descongelar la carne es desde el frigorífico. La temperatura de este, durante la descongelación protege nuestra carne del desarrollo de estos microbios de los que hablábamos. Si lo hacemos a temperatura ambiente, estamos posibilitando su desarrollo.
- Podemos utilizar el microondas para descongelar carne, siempre que se trate de piezas de carne finas, evitando zonas cocidas.
- En cuanto a los métodos de conservación. Para refrigerar la carne debemos hacerlo en temperaturas entre 4º y -2º, pero si lo que queremos es congelarlas, las temperaturas óptimas son por debajo de los -10 º.
- Una vez descongelado, lo recomendable es consumirlo antes de 24 horas. Si queremos que la calidad del alimento que nos estamos comiendo no descienda apreciablemente.
Entonces ¿Bajo ningún concepto podemos volver a congelar la carne?
Existe una excepción. Y es que la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), recomiendan congelar por segunda vez una carne, siempre y cuando haya sido cocinada antes. Y para argumentar mejor esto, nos quedamos con una frase de Carmen Tejedor, del Departamento de Microbiología y Genética de la Universidad de Salamanca “El calor sí mata a las bacterias, el frío solo las detiene”.