¿Eres un buen dueño y tus plantas te duran tiempo? Llegará un momento que el crecimiento de la planta requerirá que la transplantes de tiesto, y para ello te vamos a dar algunos consejos para que puedas seguir alargándole la vida.
El momento de transplantar una planta es cuando ésta requiera un riego casi diario para que no seque, o cuando empieza a ser demasiado grande para su tiesto.
Para lograr la combinación más atractiva de la plata y el tiesto, el diámetro de la parte superior del tiesto ha de ser de un tercio a una mitad de la altura de la planta. Una buena regla general es transplantar a un tiesto solamente una medida más grande que el tiesto original, para evitar que el recipiente no vaya a escala con la planta y de esta forma reducir las posibilidades de exceso de riego.
Cuando se transplanta, se ha de quitar toda aquella tierra que sea posible de la parte superior de la masa de raíces. Cuando las raíces de la planta envuelvan completamente a la totalidad de la tierra dentro del tiesto es hora de cambiar a otro más grande.
Debes elegir un recipiente que tenga de 2 a 4 centímetros más de diámetro que el tiesto anterior. Se echa un poco de tierra en el fondo del tiesto y se calcula para que haya dos centímetros desde el borde superior del tiesto a la capa superior de la tierra, a fin de que al regar siempre haya suficiente espacio para la irrigación adecuada.
Nunca debes plantar la planta más honda que estaba plantada anteriormente. Debes dar un buen riego una vez terminada esta operación sin que quede un charco, y no riegues otra vez hasta que la capa superior de tierra empiece a secarse.
Esperamos que estos consejos te hayan servido de ayuda. Te aconsejamos nuestro artículo sobre plantas de interior dónde encontrarás todo tipo de consejos para ubicar la planta y alargar su vida pinchando aquí. También puedes consultar nuestra categoría de hogar dónde encontrarás artículos relacionados.