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A medida que los días se vuelven más largos y las temperaturas suben, va siendo hora de limpiar y preparar los muebles de jardín para la próxima temporada. Los meses de invierno han dejado su huella y aunque no lucen como deberían, esto no debe ser razón para deshacernos de ellos.
1. Limpiadora de alta presión
Si tienes una limpiadora de alta presión, puedes usarla para eliminar la suciedad incrustada. Ten especial atención si la empleas en muebles de resina de menor calidad para no dañarlos con una presión excesiva del agua. En este caso la manguera de jardín se convierte en una buena alternativa.
2. Cepillo de mano, paño de microfibra y agua tibia.
Los muebles del jardín al encontrarse directamente en el exterior, suelen acumular polvo y suciedad en su superficie. Por eso y para facilitar la limpieza primero se deben eliminar el polvo y la suciedad superficial con un cepillo. A continuación se limpian con un paño de microfibra húmedo.
No se necesita ningún producto de limpieza especial para esto. El agua tibia con vinagre (proporción 1: 5), un multiusos o un detergente para platos es suficiente para eliminar la suciedad superficial de los muebles de jardín.
Para evitar manchas de agua, se recomienda frotar la superficie en seco después de la limpieza con el paño de microfibra. Verás como el brillo del primer día vuelve a aparecer en tus muebles.
3. Detergente o pasta de dientes para suciedad persistente
De manera especial en los muebles de resina blancos, con el paso del tiempo se asienta una capa gris en la superficie. A menudo se trata de polvo que se deposita y que paulatinamente conduce a la decoloración del material. Por lo general, estas manchas ya no se pueden eliminar con limpiadores de uso múltiple o detergente líquido, por lo que se suele recurrir a un producto más fuerte y limpiar los muebles de jardín con diferentes tipos de cremas limpiadoras.
Sin embargo, esta operación debe hacerse con cuidado. Aunque estos productos eliminan toda la suciedad sin dejar ningún residuo, también pueden conducir rápidamente a nuevos depósitos ya que causan rasguños finos en la superficie en los que la suciedad puede acumularse aún con mayor facilidad.
Los limpiadores específicos de muebles de resina no sólo funcionan en la superficie, sino que también eliminan los depósitos por completo y son más adecuados para eliminar la suciedad resistente, ya que disuelven los depósitos sin alterar la superficie del material.
También puedes recurrir a un remedio casero y con un producto que puedes encontrar en todos los hogares: la levadura.
La levadura de repostería funciona especialmente bien para muebles de resina blanco, ya que elimina suavemente las manchas antiestéticas.
Para hacer esto, simplemente vierte la levadura sobre un paño húmedo y frota los muebles con él, déjalo actuar brevemente y luego acláralo con agua.
El bicarbonato de sodio contenido en la levadura disuelve incluso las manchas difíciles y aclara la decoloración gris.
Por lo general, las áreas más sucias también se pueden limpiar bien con detergente en polvo o pasta de dientes. El tratamiento consiste en frotar las áreas correspondientes con pasta de dientes humedecida o detergente y enjuagar todo con abundante agua limpia.
4. Esponjas borrador y piedras de limpieza
Ambos productos dan buenos resultados, especialmente cuando se trata de manchas difíciles. Cuidado con los productos baratos, pueden causar arañazos o estropear la superficie del mueble. Las piedras de yeso son muy productivas y se pueden usar para muchos otros materiales. Estos productos pueden encontrarse en supermercados.
5. Pulimento de coche.
Al igual que con la pintura de coches, el esmalte da a los muebles de jardín un nuevo brillo y protege la superficie. La humedad y la suciedad simplemente se desprenden después del pulido. Particularmente con muebles de jardín que no tienen un acabado liso, el producto se debe aplicar regularmente para sellar la resina y hacerlo duradero.
6. Protege con fundas para muebles.
Además de la limpieza regular, los muebles de jardín al aire libre también deben cubrirse cuando no se utilicen. Esto los protege del viento y del clima, además de evitar que se ensucien.
Es conveniente usar una funda impermeable. Basta con cubrir los muebles y que estén muy ajustadas para que no se formen “balsas” de agua. Para evitar que se cree humedad dentro, los muebles deben estar secos y el aire debe poder circular debajo de la funda, eligiendo un modelo con chimeneas de ventilación.
Incluso en verano, para proteger los muebles de la suciedad y la humedad, es conveniente cubrirlos en los periodos en los que no se utilicen.
En los establecimientos TODOJARDIN puedes encontrar una gama enorme de fundas para muebles y complementos de exterior con todos los modelos para lo que necesites proteger.
¡Buena suerte con la limpieza
correcta de sus muebles de resina!