¿Compras y compras plantas para decorar el interior de tu casa y siempre se te mueren? ¿Incluso los cactus? Hay personas que dicen no tener, lo que se dice “buena mano” para el cuidado de sus plantas, y por mucho que se esfuerzan estas acaban durándoles apenas unas semanas o, como mucho, unos meses. Si tú también eres uno de ellos necesitas leer estos conejos.
Las plantas de interior dependen en gran parte de sus dueños para su crecimiento y buena salud. En este artículo te daremos algunos consejos para el buen cuidado de las plantas de interior, que esperamos que alarguen la vida de estas y puedas disfrutar de un ambiente y decoración excepcionales!
Ubicación y recipiente de la planta de interior
La Luz para la planta
Uno de los factores fundamentales para el crecimiento de las plantas de interior es la luz. Esto es así porqué requieren la luz por su producción alimentaria. Para mantener una planta verde y atractiva, esta debe tener una buena intensidad de luz solar, es decir, que esté cerca de una ventana y mucho mejor si está encarada a sur, oeste o este.
Te aconsejamos girar de vez en cuando la planta para que todas las hojas puedan disponer de las mejores condiciones de luz. Esto ayudará al buen crecimiento uniforme de la planta de interior.
Las plantas necesitan la luz del sol, aunque existen luces artificiales llamadas de luz solar, que también se pueden utilizar para el crecimiento de las plantas. La luz artificial nunca dará el mismo resultado que la luz natural. Del mismo modo, el período de tiempo al que la planta se somete a la luz también es importante.
La Temperatura ambiente
La mayoría de plantas de interior son tropicales o semi tropicales y se adaptarán a temperaturas diurnas de entre 20 a 24ºC con temperaturas nocturnas de 18 a 20ºC.
Evita colocar la planta de interior en lugares dónde haya cambios de temperatura mayores a 10ºC como puede ser encima de un televisor, delante de un radiador o aparatos de aire acondicionado y en puertas o repisas de ventanas en invierno. Los cambios bruscos de temperatura pueden provocar decoloración o caída de las hojas.
Este es uno de los puntos que más varía entre las distintas plantas de interior, así que te aconsejamos revisar la ficha o manual de tu planta.
El crecimiento de las plantas es afectado por la humedad en el aire, necesitan aproximadamente un 30% de humedad ambiente para el buen crecimiento. Puedes aumentar la humedad en épocas de invierno cuando la calefacción está encendida colocando recipientes encima de una bandeja que contengan gravilla con agua en el fondo.
Los baños y cocinas suelen ser espacios con la humedad en el aire más alta, puedes mover la planta en ciertos períodos. La falta de humedad provoca que las puntas de las hojas se vuelvan marrones y los capullos de la flor caigan.
Recipiente
Los recipientes de barro necesitan un riego con más frecuencia ya que la humedad se evapora a través del tiesto. Por otro lado, los tiestos de plástico no son porosos y requieren menos frecuencia de riego al no perder tanta humedad. Os aconsejamos mantener las plantas en recipientes de barro, si no os gusta, puedes meter la planta y el tiesto dentro de una jardinera decorada que te guste para el ambiente de tu habitación.
Tierra de la planta
Las plantas de interior pueden crecer en distintas mezclas de tierra aunque lo mejor es que retenga agua y abonos, a la vez que dé un drenaje adecuado y permita que el aire llegue a las raíces de la planta.
La tierra común de jardín no es generalmente apropiada para las plantas de interior ya que rápidamente se hace muy compacta y dura. Te aconsejamos las siguientes mezclas:
- 3 partes de turba y 1 parte de granulado plástico.
- 2 partes de turba y 1 parte de arena del río.
- 1 parte de turba, 1 parte de arena de río y 1 parte de corteza de pino fina.
- 1 parte de turba, 1 parte de corteza de pino fina y 1 parte de granulado plástico.
Cuidado de plantas de interior
Riego de la planta
La frecuencia de riego variará dependiendo del tiempo y tamaño de la planta, su estado de crecimiento y la humedad del ambiente.
No dejes nunca que la tierra se seque completamente entre riegos. Debes mantener la tierra húmeda pero no encharcada. Si la tierra superficial está húmeda el riego no será necesario.
Para regar la planta de interior utiliza agua tibia y aplica agua concienzudamente para que la tierra se humedezca hasta el fondo del tiesto. Evita el uso de agua mineralizada o con fluoruro.
Los recipientes sin agujeros en el fondo necesitan una capa de arena o gravilla en el fondo para dejar espacio en caso de exceso de agua. Una forma de ver si has regado en exceso es tumbar el recipiente de lado en una pila y ver si escurre. Debes tener presente que un riego excesivo provocará que las raíces se pudran y consecuentemente las hojas caigan.
Abonos
Las plantas de interior requieren algo de abono, pero poco! Generalmente la aplicación del abono de 4 a 6 veces al año será suficiente. Encontrarás abonos en forma de líquido, polvo o pastillas. Consulta al vendedor para más información sobre la aplicación del producto, y confirma en qué plantas vas a utilizar el químico.
La aplicación de abono hará que la planta no crezca excesivamente rápido, algo no deseable ya que esta sobrepasaría su recipiente. Aplica siempre las dosis recomendadas, el exceso de abono hará que las puntas de las hojas se quemen, y es uno de los principales factores de muerte de las plantas. Más vale abonar poco y centrarse más en el riego.
Mantener las hojas limpias
Las plantas de interior tienden a coger polvo y residuos en las hojas que las hacen menos vistosas. Para mantener su apariencia debes pasar un trapo húmedo con mucho cuidado por encima de las hojas.
Cuando limpies las hojas de la planta de interior debes tener cuidado de no doblar, arrugar o frotar las hojas demasiado fuerte ya que se pueden dañar fácilmente.
Para quitar los residuos que ofrezcan más resistencia debes disolver en agua una pequeña cantidad de jabón para las manos y aplicar en las hojas.
Si deseas un resultado de las hojas brillante puedes utilizar productos de jardinería cómo abrillantadores o pasar un trapo humedecido con leche sobre las hojas. Debes tener cuidado con los abrillantadores ya que su aplicación en exceso puede dañar la planta, lee atentamente las instrucciones de uso de estos productos químicos.
Esperamos que todos estos consejos te sirvan de ayuda y puedas mantener tu planta viva por mucho tiempo decorando tu habitación! Te aconsejamos consultar nuestra categoría de Hogar dónde encontrarás más artículos que pueden ser de tu interés.