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¿Eres de las que piensa que llevar ropa interior muy ajustada realza y remarca más la figura? Déjanos decirte que este beneficio estético, puede ser el culpable y el desencadenante de diversos problemas para tu salud.
Si quieres descubrir cuáles son las consecuencias de usar este tipo de prendas, sigue leyendo este post.
¿Qué se considera ropa interior muy ajustada?
La ropa interior muy ajustada es aquella que no te deja realizar movimientos de forma natural, como puede ser el hecho de agacharte o, aquella que te obliga a mantener la tripa hacia dentro continuamente.
También puedes identificar este tipo de prendas porque después de llevarlas durante un pequeño período de tiempo, te dejará marcas en la piel.
Si por ejemplo notas algún tipo de dolor debajo del vientre, también puede ser una señal que te esté indicado que debes realizar un cambio de ropa interior en tu cajón de ropa íntima.
¿Por qué no usar ropa interior muy ajustada?
Existen diversas enfermedades muy molestas provocadas por el uso continuado de ropa interior muy apretada que quizá nunca hubieses imaginado que provenían de este hecho. A continuación, te hacemos un listado de los riesgos que tiene llevar ropa interior muy ajustada en el día a día:
Infecciones
Uno de los problemas más comunes que provoca llevar ropa interior muy ajustada es el de las infecciones vaginales. Esto se debe a que como se reduce la ventilación, el calor y la humedad pueden aumentar en las zonas genitales. Esto a su vez puede alterar el pH vaginal y traer consigo un mayor riesgo de infecciones.
Irritaciones
La ropa interior, al igual que otras prendas de vestir que están en contacto directo con la piel, pueden provocar irritaciones y problemas cutáneos, especialmente en aquellas personas que padecen de piel atópica, dermatitis u otro tipo de alergias. El motivo de estas irritaciones viene provocado por el tipo de tintes que utilizan para su elaboración e incluso por el resto de químicos sobrantes del detergente.
Mala circulación sanguínea
Si eliges una ropa interior demasiado ajustada, dificultará que la sangre circule correctamente por las diferentes zonas del cuerpo. Además, si llevas unas braguitas altas que llegan hasta el ombligo y te aprietan en la zona abdominal, podrás llegar a sentir una mayor sensación de cansancio, hinchazón y hormigueo en las extremidades.
Ansiedad
¿Parece raro este hecho verdad? Pues no lo es si se tiene en cuenta el punto anterior. Al limitar la circulación en sangre, aumenta la retención de dióxido de carbono en el organismo. Esto en un futuro puede influir negativamente en tu salud mental, como por ejemplo dificultando tu concentraci´ón o aumentando el riesgo de padecer ansiedad.
Molestias estomacales
La presión que ejerce la ropa íntima más ajustada también puede afectar a la salud digestiva. Muchos investigadores indican que estas prendas empujan el ácido estomacal hacia arriba y pueden producir los conocidos síntomas del reflujo, como la tos, ardores, etc.
Pero además, ¿alguna vez le has echado la culpa de tus estreñimientos a la comida? Pues hemos de decirte que a veces, aún comiendo comidas ricas en fibra, es fácil estreñirse si se usa ropa íntima muy apretada, ya que los intestinos no pueden realizar su trabajo correctamente y puede provocar más gases o dificultades para ir al baño.
Dificultad para respirar
Determinadas prendas interiores cuentan con un elástico que queda por la zona del abdomen. Si éste es muy ajustado puede dificultar en mayor medida la respiraci´ón. El motivo se debe a que la presión que ejerce sobre el abdomen impide que tanto el tórax como los pulmones se expandan de manera correcta.
Problemas de postura
Si alguna vez te has puesto un sujetador demasiado apretado para que te realce los pechos, debes saber que esto puede afectar a la salud de tu espalda y a la columna vertebral, ya que tenderás a poner posturas incorrectas de hombros, cuello o cabeza.
¿Qué tipo de ropa interior se debe usar?
El objetivo principal de la ropa interior es la de proteger la zona íntima. Por ello te aconsejamos utilizar ropa íntima cómoda y holgada que favorezca la circulación del aire y que pueda absorber fácilmente la humedad que se llegue a generar.
Teniendo en cuenta los estos dos aspectos, lo mejor es utilizar ropa interior de algodón, ya que proporciona la suavidad y frescura necesarias para el cuidado de la zona íntima.